lunes, 21 de mayo de 2012

El viaje



Elena está mirando el mar turquesa y cristalino a través del ojo de la ventana, cuando por el altavoz suena el último aviso para desembarcar. Revisa la maleta, no falta nada. Ya ha metido el ordenador, la ropa, la cámara de las fotos, los recuerdos... ¿El móvil? En la mano, menos mal. Está esperando una llamada muy especial.

Sale al pasillo donde se reencuentra con otros pasajeros. Canturrea la música suave de fondo que envuelve y aligera la espera. El sol reverbera sobre el suelo blanco y azul marino. A su izquierda unos niños corretean y juegan a esconderse entre las hamacas y tumbonas de la cubierta; otro grupo, está intercambiando sus teléfonos y correos; a la derecha, una familia repasa una vez más todo lo que quieren hacer antes de bajar a puerto.

Decide dar un paseo para que la espera se haga más corta; mientras, se cruza con parejas de enamorados, ancianos, personas cuya edad y apariencia son indefinidas; otros parecen tan despistados como ella, van buscando la puerta que les deje en tierra firme. Sigue cantando.

Por fin suena la melodía de su móvil. Acaba de recibir un mensaje. "Estamos todos. Te esperamos con alegría. Nos vemos enseguida. Besos". Se acerca a la pasarela de salida. Desde allí puede ver a parte de su familia, han venido a recibirle sus padres y sus abuelos. El corazón le palpita, está contenta, feliz por un reencuentro anhelado; y sonriendo les devuelve el saludo.

Comienza el viaje a su nueva vida, dejando atrás el pasado que ya no importa. Y fiel a la tradición, abandona a Caronte, tras haberle pagado el óbolo exigido por la travesía.


La imagen está tomada de internet y desconozco quién es su autor.

43 comentarios:

Unknown dijo...

El barquero Caronte se queda tranquilo, ella tenía el óbolo bajo la lengua, y Elena comenzaba una nueva vida con ilusión.

Preciosa historia

Julius Revolution dijo...

Que bueno Mª Eugenia, como alguien decía por mi blog, cuando morimos solo cambiamos de medio de transporte...Que bueno, allá estarán todos para acompañarnos...Abrazos amiga.

Diana de Méridor dijo...

Suena como un viaje agradable. Como unas vacaciones, pero con el inconveniente de que no se puede regresar después cuando uno quiera.

Buenas noches, madame

Bisous

ion-laos dijo...

Y qué felicidad llegar a la luz y que te esperen con tanto amor y desapegarte de lo que ya no importa.

Qué bonito!!

Besotes!

Irhati dijo...

Hola Maria Eugenia,
Si no hubiera sido por el comentario anterior, te aseguro que esta historia que nos presentas, te la hubiera comentado de diferente manera. Aunque Un tanto imprecisa, y abstracta, los cantos, las apariencias, los abuelos, pero es que lo del movil me ha despistado sin caer en el sentiodo alegórico de la trayectoria final de la vida física.
Me he quedado admirada con tu imaginación dando al fin que persigues un relato tan ameno y tan feliz y tan..actualizado, !!
Me ha encantado chica, lo que estoy aprendiendo contigo.
Un cariñoso abrazo.

Dolce Voce - María Eugenia dijo...

Hola, Saudades

Y menos mal que tenía el óbolo ;). Mejor llevarlo bien cerca, porque quedarse vagando por toda la eternidad hasta que se digne a pasarle al otro lado... es mucho esperar.

Besotes.

Dolce Voce - María Eugenia dijo...

Hola, Julius

Si, allí estarán y algunos nos recibirán con alegría y quién sabe si organizarán alguna que otra fiesta. ;).

Besotes.

Dolce Voce - María Eugenia dijo...

Hola, Madame

Bueno, si se vuelve y hasta se puede elegir cuándo volver. Aunque no suele ser de manera inmediata.

Será un bonito viaje. Podemos prepararnos para vivirlo de la mejor manera posible. Eso si, no estamos llamando a la muerte para nada. ;).

Besotes.

Dolce Voce - María Eugenia dijo...

Hola, Ion

Pues si, es bonito. De algún modo es volver a casa y que te reciban con los brazos abiertos. Me apunto a esta experiencia, llevaré globos ;).

Besotes.

Dolce Voce - María Eugenia dijo...

Hola, Irhati

Me alegro que te haya gustado.

Digamos que juego con ventaja, porque hablo sobre el tránsito y la muerte, del viaje al más allá, a través de lo que es y cómo es, un viaje de vuelta a casa.

El tránsito y el más allá y temas parecidos forman parte de mi trabajo y mi don. Me resulta muy fácil hablar de ellos.

Besotes.

María dijo...

Querida Eugenia, me encanta tu imaginación.

Un feliz viaje donde la luz y alegría comienza.

Un beso grande.

uxue dijo...

Hola Maria Eugenia

Qué viaje tan especial...el último y el más importante para una persona.
Qué maravilla es concebirlo así y hacer el trayecto cantando y con esperanza.

Me ha encantado tu relato, esa mezcla de lo real con lo trascendental le ha dado un toque cotidiano y a la vez fantástico.

Muy bueno, gracias por compartirlo, sobre todo por lo que significa, pues hace sentir ese momento del viaje final sin temor y con naturalidad.
Un beso grande

Dolce Voce - María Eugenia dijo...

Hola, María

Me alegro que te guste el relato. a veces también me pregunto, de dónde me vienen las ideas. Esta vez lo tengo claro, pero otras te aseguro que no.

Ojalá que nunca falta la imaginación en ninguna persona. Qué haríamos sin ella.

Besotes.

Dolce Voce - María Eugenia dijo...

Hola, Uxue

Alguna vez, alguno de los seres con los que he conectado, han contado que les han recibido con música, alegría y fiestas.

Pensé que podía ser bonito explicar que hay viajes o tránsitos divertidos y nada tristes.

Desde luego, me apunto a vivir un viaje así. ;).

Me alegro que te haya gustado :D.

Besotes.

Anónimo dijo...

Excelente post amiga...aunque también por un momento me confundí por aquello del celular..pero despues de leer los comentarios anteriores, entendí :).. Has plasmado en letras un viaje muy, muy tranquilo al más alla, me ha gustado mucho como has descrito el transito de una vida a otra, creo que es muy tranquilizante pensarlo así...aunque como bien dices..eso no quiere decir que estemos llamando a la muerte...nooo...para nada..jajaaa.

Besitos.

Dolce Voce - María Eugenia dijo...

Hola, Diazul

Jjaajaj el móvil, si era un guiño. Es que a un viaje lo llevamos todo ;).

Pero con el óbolo, Caronte y la travesía quedaba al descubierto la realidad. El viaje al más allá, teniendo a Caronte como barquero tras pagar la moneda por cruzar la laguna Estigia.

Nooooooo, no, no, nos queda mucho por vivir y disfrutar, jaajajajajaa :D.

Pero creo que todos nos apuntamos a un viaje parecido. Eso si, un viaje en camarote de primera catagoría, qué mínimo :D.

Me alegro que te haya gustado.

Besotes.

MAJECARMU dijo...

M.Eugenia,es realmente bonito tu cuento,me ha encantado...Se palpa la VIDA con mayúsculas,que es superior y más plena que la presente,al menos en tu relato,amiga.
Lo hemos visto muy real y cercano.
Mi felicitación y mi abrazo inmenso.
FELIZ SEMANA,M.Eugenia.

Adriana Alba dijo...

Que bello.

Todos los viajes impilcan nuevas experiencias y aprendizaje, tanto si son hacia el interior o hacia otras dimensiones.

Tu cuento me encantó M. Eugenia.

Cariños.

Dolce Voce - María Eugenia dijo...

Hola, María Jesús

Me alegra que te haya gustado. Es muy bonito lo que comentas sobre la vida con mayúsculas :D.

He aprovechado para contar parte de la información que he ido recibiendo de varios seres, que para ellos ha sido muy real.

Besotes.

Dolce Voce - María Eugenia dijo...

Hola, Adriana

Si, es muy cierto lo que comentas. Los viajes son aventuras abiertas a lo desconocido, a experiencias y aprendizajes.

Qué bien que te ha gustado.

Besotes.

ion-laos dijo...

Con música? pero qué tipo de música?

Qué cosa más curiosa, nunca lo habría imaginado, pero está bien, porque yo bailo hasta la del telediario, jajajaja.

Besotes!

Gloriana dijo...

Me gustaría que mi último viaje fuera así, como el de Elena. Un cariñoso reencuentro familiar y...tener un óbolo bajo la lengua para comprar un mejor trayecto.

Abrazos, Mª Eugenia!

Dolce Voce - María Eugenia dijo...

Hola, Ion

Me he perdido. ¿A qué te refieres con lo de la música?

Besotes.

Dolce Voce - María Eugenia dijo...

Hola, Gloriana

También me apunto a un viaje como el de Elena. Divertido, suave, feliz y lleno de amor. Además de el reencuentro con los seres queridos. ¿Dónde hay que firmar?

Besotes.

J.Eugenia Mares dijo...

Es un maravilloso viaje, es llegar a destino e instalarse abrazados por el amor de la familia que llego primero y le espera con tranquilidad y mucha paz:D
gracias hermosa es tan bello leerte.
tan así como el azul del mar y el cielo unidos.
un beszaso y un gran abrazo.

Dolce Voce - María Eugenia dijo...

Hola, Atlántida

Me alegro que te haya gustado. Es bonito ser recibido por los seres a los que queremos y hemos amado. El volver a casa con los brazos abiertos.

Besotes.

ion-laos dijo...

En el comentario de Uxue.


Alguna vez, alguno de los seres con los que he conectado, han contado que les han recibido con música, alegría y fiestas.

Pensé que podía ser bonito explicar que hay viajes o tránsitos divertidos y nada tristes.

Desde luego, me apunto a vivir un viaje así. ;).

Me alegro que te haya gustado :D.

Besotes.

Dolce Voce - María Eugenia dijo...

Hola, Ion

Ahora si lo he entendido. Es que he mirado la conversación entre nosotras y no lo pillaba ;). Mil gracias por la aclaración.

Si, hay seres que han descrito fiestas con música. La verdad que no les he preguntado qué escuchaban pero me imagino que seguro era música que a ellos les gustaba, a quién le guste el pop o una canción especial, es lo que oirán; lo mimso si es ópera, folk, bongos.....

Pero si me acuerdo, la próxima vez que comenten que les reciben con fiestas, les pregunto qué oyen.

Besotes.

P.D. Vete preparando una lista de canciones y música... :D.

Elcaligrafista dijo...

Partir y llegar son dos verbos que se conjugan en el mismo acto...

mi beso.

ion-laos dijo...

Lo que me llama la atención además de la música, es si usan instrumentos.

Música de piano, que me da que por aquellos lares junto con el arpa, es de lo más apropiado...Hay que ver lo que me ha sorprendido esto, es una cosaaaa...

Besos!!

METAMORFOSIS dijo...

Wuaauuuu Maria Eugenia...la frase final le da sentido a todo el texto, que genial!!!
Al menos en ese nuevo mundo le esperaban sus seres queridos, no iba a sentirse sola.
Pero tengo una pregunta, llevaba esta mujer de verdad un obolo???? no llevaba euros??? dios mio con esto de la prima de riesgo y la crisis no me extraña que volvamos a otro tipo de monedas....a saber...
Besis.

Carmen Rosa dijo...

Hola MARÍA EUGENIA
Sin duda el viaje más importante de todos. Hermosa manera de narrarlo y la foto preciosa con ese turquesa del mar.
Gracias por este relato.
Un beso

Dolce Voce - María Eugenia dijo...

Hola, El Caligrafista

Qué bonito lo que has dicho. Me ha gustado mucho.

Besotes.

Dolce Voce - María Eugenia dijo...

Hola, Ion

Pues chica, lamento no tener más información.

Tendrás que esperar a que vaya y me acuerde de informar a todos de lo que vea, o a que encuentres a alguien que quiera darte esa información antes de tu partida ;).

Besotes.

Dolce Voce - María Eugenia dijo...

Hola, Metamorfosis

Jjaajajaja, llevaba un óbolo para que se entendiera la historia. De mismo modo que el se despedía de Caronte, eran pistas sobre cuál era el viaje.

En realidad, no hace falta que llevemos nada, el viaje es gratuito y lo de menos es la moneda que llevemos, porque a este paso volveremos al trueque .....

Besotes.

P.D. Sigo dándole vueltas a lo de Don Quijote.

Dolce Voce - María Eugenia dijo...

Hola, Carmen Rosa

Ese mar turquesa, en teoría, corresponde a una foto de Grecia. Luego no se de dónde será, ajjajajajaj

Me alegro que te haya gustado el relato. Si, es el viaje más importante que hacemos o uno de ellos, porque el nacer, no deja de ser otro viaje básico para todos ;).

Besotes.

Dolce Voce - María Eugenia dijo...

Hola, Gata

Muchas gracias por tu poesía y tu visita.

Besotes.

Anónimo dijo...

Que bonito viaje...empezar de nuevo y sin miedos...
Cielo, ayudas mucho, de verdad...ni te lo imaginas...los "fantasmas e ideas preconcebidas, los miedos, todo...desaparece al leerte...
Gracias!

Javier dijo...

Una dulce despedida para comenzar una nueva vida

Saludos y buen fin de semana

Olga i Carles (http://bellesaharmonia.blogspot.com dijo...

Anhelamos esa busqueda en un viaje que parece sin retorno... pero a la hora de la verdad, siempre hay una vuelta al origen para seguir aún más despierto.


Un abrazo.

Gracias.

Dolce Voce - María Eugenia dijo...

Hola, Remei

Mil gracias por lo que dices. Ya sabes qué esa es mi intención, que viajemos felices y contentos, al menos lo más tranquilos que podamos ;).

Besotes.

Dolce Voce - María Eugenia dijo...

Hola, Javier

Pues si, de eso se trata. Muy bien explicado :D.

Feliz fin de semana.

Besotes.

Dolce Voce - María Eugenia dijo...

Hola a los dos

Siempre regresamos y volvemos a casa para seguir aprendiendo. La vida es viaje en espiral. ;).

Besotes.