Si me sueltas la mano, caigo,
vuelo, aprendo, amo;
sorprendida por la ligereza
del abrazo,
comedida por la sacudida,
del amor.
Pura electricidad
en el cuerpo
que deja paso
a largos espacio abiertos,
tras noches somnolientas,
durmiendo bajo las estrellas,
susurrantes de anhelos y deseos.
cambiantes tras la luz de la luna.
Nadie dijo que era fácil
ser y siendo.
La imagen está tomada de internet y desconozco quién es su autor.